martes, 27 de marzo de 2012


Tratamiento


El uso de corticosteroides durante los brotes (recaídas, episodios agudos, exacerbaciones) de la enfermedad se remonta a principios de los años sesenta y se ha afianzado como el tratamiento de elección para disminuir la duración y gravedad. Su mecanismo de acción es multifactorial; los esteroides administrados por vía endovenosa restauran el aumento de permeabilidad de la barrera hematoencefálica, disminuyen la inflamación y mejoran la conducción a través de áreas desmielinizadas. Además, disminuyen los niveles de IgG y proteína básica de la mielina en líquido cefalorraquídeo. Clínicamente, aceleran la recuperación de los brotes aunque no está demostrado que influyan en la historia natural de la enfermedad ni en la discapacidad final.

Prednisolona
Las dosis varían de 500 a 1000 mg al día, durante un periodo que puede ser de 3 a 10 días, con o sin pauta descendente de prednisona oral.  Una pauta útil podría ser 1 g diario de metilprednisolona endovenosa durante 5 días, seguida por un curso de prednisona oral en dosis decreciente, comenzando por 60 mg al día  y bajando 10 mg cada 3 días. Se deben controlar periódicamente los electrolitos y la glucosa oral, y conviene utilizar protección gástrica. Además de los efectos adversos gastrointestinales, en ocasiones se observa enrojecimento facial, sabor metálico, edema y euforia.
Los brotes menos intensos pueden controlarse únicamente con prednisona oral (60 mg. al día durante una semana y disminuir 20 mg. cada semana).

Inmunosupresores

Puesto que son muchos los datos que apoyan una patogenia inmunomediada de la enfermedad, se han utilizado diversos fármacos inmunosupresores de forma continuada para tratar de frenar su evolución. Entre ellos están la azatioprina, laciclofosfamida en bolos y la ciclosporina. Su uso está limitado por la toxicidad. El que produce menos efectos adversos es la azatioprina, aunque también requiere realización de controles hematológicos periódicos. Está comprobado  que a partir de un año de tratamiento puede disminuir la frecuencia de brotes y la acumulación de discapacidad. En esta misma línea va aumentando la experiencia favorable de la utilización de Mitoxantrona, si bien hay que aceptar el riesgo de leucemia o tumores sólidos malignos durante los 5 años siguientes al tratamiento.

Interferón

Se ha demostrado en base a estudios multicéntricos que el interferón betarecombinante (a días alternos en inyección subcutánea) es capaz de reducir en un30 por ciento la tasa de brotes respecto al placebo, disminuyendo también el área lesional total y el número de lesiones nuevas o activas en resonancia magnética con gadolinio. También a largo plazo tiene efecto en la disminución de la progresión de la discapacidad.
Su mecanismo de acción parece ser multifactorial e independiente de su actividad antiviral: disminuye la activación de células T inducida por mitógenos, disminuye la secreción de interferón-gamma y factor de necrosis tumoral por células mononucleares, disminuye la producción intratecal de IgG, mejora la función supresora y disminuye la expresión de moléculas HLA de clase II sobre monocitos y células del SNC.
Los efectos secundarios más frecuentes del tratamiento con interferón-beta son reacciones locales en el lugar de la inyección, y un síndrome pseudogripal con febrícula, mialgias y fatiga que cede con paracetamol o ibuprofeno. Estas reacciones tienden a desaparecer con el tratamiento continuado.
Durante el tratamiento conviene realizar controles hematológicos periódicos y también de función renal, hepática y tiroidea.
Se han comunicado casos de disminución moderada  de leucocitos y elevación de enzimas hepáticas que revirtieron al interrumpir el tratamiento.

Acetato de Glatiramero (Copaxone)

Su eficacia es similar a la de los interferones, aunque el mecanismo de acción es diferente. Se trata de un compuesto sintético semejante a la proteína básica de la mielina, sin la capacidad de esta de producir encefalitis. Bloquea la reacción antígeno-anticuerpo, impidiendo de este modo el daño de la vaina de mielina. Se administra en inyección subcutánea diaria y los efectos secundarios suelen ser escasos y, locales, siendo el más importante el de su capacidad para originar reacciones alérgicas.

Natalizumab


Es un anticuerpo monoclonal humanizado, contra la integrina alfa-4, se trata por tanto de un inhibidor selectivo de moléculas de adhesión, que logra inhibir la migración de las células inmunitarias al tejido en el que originan la inflamación, al evitar su fijación a la pared vascular.  Se ha comprobado su eficacia tanto en esclerosis múltiple como en la enfermedad de Crohn – proceso inflamatorio intestinal-. El fármaco había sido retirado cautelarmente del mercado, en febrero de 2005, por haber originado infecciones graves por virus oportunistas. En junio de 2006, ha vuelto a autorizarse con restricciones- pacientes  de esclerosis  múltiple, que no responden a Beta-interferón y con formas agresivas de enfermedad-. Su eficacia en la reducción de brotes y lesiones en RM, es muy superior a la del Beta-interferón. Su uso se ve limitado por la posible aparición de leucoencefalitis multifocal progresiva, aunque la incidencia es baja y por encima de los dos años de tratamiento. El disponer de la posibilidad de determinación de ac anti virus JC, permite seleccionar pacientes con menos riego de desarrollar esta complicación.

Plasmaféresis

La experiencia con recambio plasmático ha sido muy irregular, respondiendo solo un pequeño porcentaje de pacientes. La existencia de formas de esclerosis múltiple mediadas por anticuerpos, hace pensar que esta técnica podrá aplicarse y predecirse su eficacia, en formas graves en las que detecten anticuerpos, que puedan estar implicados en la etiopatogenia de la enfermedad.


Tratamiento sintomático
La espasticidad se puede tratar con diazepam o con baclofén, cuya dosis ha de aumentarse progresivamente a razón de 5 mg cada 3 días hasta alcanzar un dosis no superior a 80 mg al día. Para el dolor, la carbamazepina es el fármaco de elección para tratar las disestesias dolorosas y otras manifestaciones sensitivas paroxísticas de la enfermedad, como la neuralgia del trigémino o el signo de L’Hermitte (sensación de descarga eléctrica al flexionar la cabeza), también son eficaces la gabapentina y susderivados. Los tratamientos disponibles para la fatigatienen una eficacia relativa, pero en algunos pacientes resultan de utilidad el clorhidrato de amantadina y la pemolina.


Diagnóstico:

El diagnóstico puede ser muy difícil. Como no existe una prueba única que pueda confirmar la existencia de EM, el proceso suele incluir: 

1) Información del historial médico de la persona 
2) Un examen clínico 
3) Pruebas de laboratorio: 


  • Punción lumbar (punción raquídea) para exámenes del líquido cefalorraquídeo, incluyendo bandas oligoclonales en LCR
  • Las resonancias magnéticas en el cerebro y de la columna son importantes para ayudar a diagnosticar y hacerle seguimiento a la EM
  • Estudio de la función neurológica (examen de los potenciales provocados)
  • Las pruebas de potenciales evocados (EP), estudios eléctricos de diagnóstico que pueden mostrar si ha habido una disminución en el flujo de mensajes en varias partes del cerebro.

Síntomas:

Los síntomas varían según  la localización, y  la magnitud de cada ataque puede ser diferente. Los episodios pueden durar días, semanas o meses y se alternan con períodos de reducción o ausencia de los síntomas. La fiebre, los baños calientes, la exposición al sol y el estrés pueden desencadenar o empeorar los ataques
Debido a que los nervios pueden resultar dañados en cualquier parte del cerebro o la médula espinal, los pacientes con esclerosis múltiple pueden tener diferentes síntomas dependiendo da la parte del cuerpo afectada.


SÍNTOMAS MUSCULARES:

  • Pérdida del equilibrio
  • Espasmos musculares
  • Entumecimiento o sensación anormal en cualquier área
  • Problemas para mover los brazos y las piernas
  • Problemas para caminar
  • Problemas con la coordinación y para hacer movimientos pequeños
  • Temblor en uno o ambos brazos o piernas
  • Debilidad en uno o ambos brazos o piernas


SÍNTOMAS VESICALES E INTESTINALES:
  • Estreñimiento y escape de heces
  • Dificultad para comenzar a orinar
  • Necesidad frecuente de orinar
  • Urgencia intensa de orinar
  • Escape de orina (incontinencia)

SÍNTOMAS OCULARES:

  • Visión doble
  • Molestia en los ojos
  • Movimientos oculares rápidos e incontrolables
  • Perdida de la visión (usualmente afecta un ojo a la vez)

ENTUMECIMIENTO, HORMIGUEO O DOLOR:

  • Dolor Facial
  • Espasmos musculares dolorosos
  • Sensación de picazón, hormigueo o ardor en brazos y piernas

OTROS SÍNTOMAS CEREBRALES Y NEUROLÓGICOS:

  • Disminución del período de atención, de la capacidad de discernir y pérdida de la memoria
  • Dificultad para razonar y resolver problemas
  • Depresión o sentimientos de tristeza
  • Mareos o pérdida del equilibrio
  • Hipoacusia

SÍNTOMAS SEXUALES:

  • Problemas de erección
  • Problemas con la lubricación vaginal

SÍNTOMAS DEL HABLA Y DE LA DEGLUCIÓN:

  • Lenguaje mal articulado o difícil de entender
  • Problemas para masticar y deglutir
La fatiga es un síntoma común y molesto a medida que la EM progresa y con frecuencia es peor al final de la tarde.

Causas:


Si bien la causa (etiología) de la esclerosis múltiple todavía no se sabe, los científicos creen que una combinación de varios factores pueden estar involucrados. Se están realizando estudios en las áreas de inmunología (la ciencia del sistema inmunológico del cuerpo), epidemiología (que se ve en los patrones de enfermedad en la población), y la genética en un esfuerzo por responder a esta pregunta importante. Entender lo que causa la EM será un paso importante hacia la búsqueda de fórmulas más eficaces para tratar y en última instancia, curar, o incluso evitar que ocurra en el primer lugar.
Las principales teorías científicas sobre las causas de la EM son las siguientes:

Inmunológicas


En la actualidad se acepta generalmente que la esclerosis múltiple implica un proceso autoinmune, una respuesta anormal del sistema inmunológico del cuerpo que se dirige contra la mielina (la vaina grasa que rodea y aísla las fibras nerviosas) en el sistema nervioso central (SNC: el cerebro, la columna vertebral médula y los nervios ópticos). La hora exacta de antígeno , o el objetivo de que las células inmunes son sensibles a los ataques, sigue siendo desconocido. En los últimos años, sin embargo, los investigadores han sido capaces de identificar que las células inmunes a montar el ataque, algunos de los factores que hacen que para atacar, y algunos de los sitios, o los receptores, en las células que atacan que parecen ser atraídos por el mielina para comenzar el proceso destructivo. Los esfuerzos en curso para aprender más sobre el proceso autoinmune en MS-lo que pone en marcha, cómo funciona y cómo frenarla o detenerla-nos están acercando a la comprensión de la causa de la EM.
 

Ambiental


MS se sabe que ocurren con más frecuencia en las zonas que están más lejos del ecuador. Epidemiólogos de los científicos que estudian los patrones de la enfermedad está buscando en cuenta muchos factores, incluyendo variaciones en la geografía, la demografía (edad, sexo y origen étnico), la genética, causas infecciosas y los patrones de migración, en un esfuerzo por entender por qué. Los estudios de los patrones de migración han demostrado que las personas nacidas en una zona del mundo con un alto riesgo de esclerosis múltiple que luego pasar a una zona con un menor riesgo antes de la edad de 15 años, el riesgo de adquirir su nueva área. Estos datos sugieren que la exposición a algún agente ambiental que se produce antes de la pubertad pueden predisponer a una persona a desarrollar esclerosis múltiple más adelante.

Algunos científicos piensan que la razón puede tener algo que ver con la vitamina D, que el cuerpo humano produce naturalmente cuando la piel está expuesta a la luz del sol. Las personas que viven cerca del ecuador están expuestos a mayores cantidades de luz solar todo el año. Como resultado de ello, tienden a tener niveles más altos de producción natural de vitamina D, que se cree que tienen un impacto beneficioso sobre la función inmune y puede ayudar a proteger contra las enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple. La posible relación entre la EM y la exposición al sol está actualmente siendo estudiada en un estudio epidemiológico, financiado por la Sociedad en Australia.

Infecciosa


Dado que la exposición inicial a numerosos virus, bacterias y otros microbios se produce durante la infancia, y dado que los virus son bien reconocidos como causas de la desmielinización y la inflamación, es posible que un virus u otro agente infeccioso es el factor de activación en la EM. Más de una docena de virus y bacterias, como el sarampión, moquillo canino, el virus herpes humano 6, el virus de Epstein-Barr y la neumonía por Chlamydia han sido o están siendo investigados para determinar si están involucrados en el desarrollo de la EM, pero ninguno ha sido definitivamente probado para desencadenar la esclerosis múltiple.


Genética


Los cambios en la región HLA del cromosoma 6 puede incrementar la probabilidad de padecer EM. 
La EM no se considera una enfermedad hereditaria. Sin embargo, un número de variaciones genéticas han demostrado aumentar el riesgo de desarrollar la enfermedad. 
El riesgo de adquirir la EM es mayor en los familiares de una persona con la enfermedad que en la población general, especialmente en el caso de los hermanos, padres y niños. La enfermedad tiene una tasa general de recurrencia familiar de 20%. En el caso de los gemelos monocigóticos, la concordancia se da sólo en un 35% de los casos, mientras que desciende a alrededor del 5% en el caso de los hermanos e incluso más baja en medio hermanos. Esto indica que la susceptibilidad es, en parte impulsado por poligénica. Parece ser más común en algunos grupos étnicos que a otros. 
Además de los estudios familiares, los genes específicos han sido relacionados con la EM. Las diferencias en el antígeno leucocitario humano (HLA) el sistema de un grupo de genes en el cromosoma 6, que sirve como el complejo mayor de histocompatibilidad (MHC) en seres humanos, incrementar la probabilidad de padecer EM. El hallazgo más consistente es la asociación entre la esclerosis múltiple y los alelos del MHC define como DR15 y DQ6. Otros han mostrado un efecto protector, como el HLA-C554 y el HLA-DRB1.

Definición:


La Esclerosis Múltiple (E.M.) es una enfermedad autoinmune y neurodegenerativa del sistema nervioso central que afecta a la capacidad del cerebro para controlar funciones como el habla, la vista, el sistema locomotor, etc. Consiste en una desmielanización de las neuronas las cuales pueden aparecer como islas en el cerebro y la médula espinal provocando el bloqueo o retención de los impulsos nerviosos y en consecuencia de muchas funciones corporales.  Se denomina múltiple porque afecta de forma dispersa al cerebro y a la médula espinal, y esclerosis porque da lugar a la formación de tejidos endurecidos en las zonas dañadas del sistema nervioso. El tejido endurecido es causada por  el daño a la vaina de mielina, la cubierta protectora que rodea las neuronas. Cuando esta cubierta de los nervios se daña, los impulsos nerviosos disminuyen o se detienen.